Introducción
La sociedad en el siglo XXI, ha logrado un gran
desarrollo científico técnico y aún continúa con el problema del analfabetismo,
que se extiende como una pandemia global e injusta. Este elemento sirve para
ilustrar las grandes contradicciones que caracterizan esta época. Muchos
hombres y mujeres se ven imposibilitados de acceder al conocimiento y la
cultura, manteniendo latente la necesidad de prestarle atención a la existencia
y desarrollo de la educación. El mejoramiento de la educación demanda de la
profundización en el estudio de sus características y particularidades, como
premisa esencial para la determinación de cualquier alternativa educacional que
se desee emplear y que debe tener en cuenta:
El encargo social que le corresponde; la formación
integral de la personalidad y proporcionar en cantidad y calidad, la fuerza de
trabajo calificada necesaria al desarrollo económico y social del país. Desde
esta necesidad, en varios países latinoamericanos se aboga por una educación
que prepare para el emprendimiento laboral futuro educando en y para el
trabajo. (Martínez, 2023).
- Las
particularidades de los estudiantes de cada nivel escolar, conocimientos e
intereses.
- Los
programas y planes de estudio contextualizados a las demandas de la
actualidad.
- La
continuidad de estudio, propiciando la continuidad al nivel
correspondiente.
- El carácter
politécnico y laboral; preparando a los estudiantes para acceder al mundo
laboral, formándolos en y para el trabajo.
- El carácter
masivo, popular, brindando la posibilidad de estudio a todo el que lo
necesite, sin distinción de edad, sexo, color de la piel o situación
social.
La educación es uno de los recursos más importantes
para pensar en la trasformación social, Se le brinda a la sociedad como una vía
para el logro de un estado de cambio, equilibrio y mejora. (Castro, et al. 2023).
Luego las instituciones modifican sus prácticas y métodos de trabajo social
hacia el entorno que den respuestas eficaces y eficientes a la educación como
proceso social de largo alcance. En el caso de las universidades tienen un reto
orientado hacia la formación del profesional, no solo en el ámbito laboral,
sino también en su responsabilidad social. (García, et al., 2020).
Cada formación económica social ha tenido como
tendencia social el interés por la conservación y transformación de la cultura
mediada por el proceso de socialización en el que la educación ha sido un hecho
de suma importancia por su incidencia en la adaptación de los individuos a los
diferentes contextos socioculturales. (Martí et al., 2018). La relación educación y sociedad en el
contexto contemporáneo implica una mirada a su devenir histórico y cómo se concreta en las instituciones educativas.
(González, et al., 2021)
En el marco de la educación superior en la
Republica Dominicana y en el ámbito específico de la formación docente, se
identifican diversas situaciones necesarias de estudiar a profundidad, para
seguir mejorando y desarrollando la educación nacional. La preparación de maestros
y maestras, con alto perfil profesional, en capacidad de incorporarse a la
formación integral de la población, es un aspecto relevante, para ofrecer
conocimientos, formar en valores y ciudadanía, a la población joven, futuro de
la nación. La educación no es memorización de contenidos, es un proceso de
formación integral, que coadyuva a una mejor calidad de vida de los ciudadanos,
criterio que refuerza la función social de la educación. (López y Zawaday, 2021)
En el presente artículo se analiza la educación
como fenómeno social, su carácter histórico concreto, las particularidades que
presenta en la sociedad dominicana actual, donde existen amplios sectores que
no acceden a la educación y otros que llegan a la educación superior, pero no
cuentan con los recursos necesarios para poder finalizar los estudios y deben
abandonarlos. El surgimiento y desarrollo de la sociedad está unido a la
educación, parte esencial de la vida, componente de la práctica social, que
permite la conservación y reproducción del conocimiento y de las costumbres,
los patrones, las normas y valores que caracterizan al ser humano como portador
de una cultura específica, como representante de un pueblo o de una nación.
Los apuntes sobre la educación en los párrafos
anteriores permiten el estudio de la
educación en la República Dominicana y las
particularidades de esta en la
educación superior, favorece la comprensión de los factores sociales que
influyen desfavorablemente en el desarrollo educacional y que demandan
transformaciones desde la investigación educativa para buscar alternativas que faciliten el
acceso a la educación de las amplias masas del pueblo trabajador, vía esencial
para lograr una sociedad próspera, justa, inclusiva y culta. Luego se requiere
identificar las particularidades de la educación superior en República
Dominicana que repercuten en las cifras de ingreso a este grado de escolaridad,
objetivo de la presente investigación, que busca una alternativa para que los
estudiantes en situación de vulnerabilidad puedan culminar sus estudios.
Materiales y métodos
El presente
trabajo se inscribe en la concepción dialéctica de la investigación, que
orienta la integración de los elementos cualitativos obtenidos en el proceso de
indagación teórica. Se utilizaron dentro de los métodos:
- El histórico-lógico, que permite
la reproducción lógica del desarrollo y comportamiento de la educación
superior en la República Dominicana que favorece la adecuada determinación
de su problemática.
- Para el estudio de las particularidades de la educación
superior en República Dominicana, lograr su identificación y efecto en el
ingreso a este nivel de escolaridad se utilizó el método
inductivo-deductivo, que permite ir de lo particular a lo general y
viceversa, logrando el establecimiento de las particularidades generales
que caracterizan a la educación dominicana actual.
- El método
de análisis y síntesis, hizo posible la interpretación de su realidad
educativa recogida en las diferentes de fuentes de información y arribar a
conclusiones.
- La sistematización como procedimiento facilitó el tratamiento de la
información relacionada con la educación como proceso social en las fuentes
consultadas; como método favoreció la interpretación de los
conocimientos que aportan los autores consultados sobre el tema a partir
de la experiencia profesional de las autoras del presente artículo.
- El
análisis documental y de contenido se emplea igualmente para la
interpretación y sistematización de los diferentes criterios y enfoques de
los autores consultados.
- El
proceso de búsqueda y recuperación, permitió, con la mediación de las
tecnologías, la localización de las fuentes, básicamente artículos de
revistas en bases de datos indexadas; Scielo, Redalyc. Se trabajó en la
recuperación de las direcciones web adjuntas a las fuentes de información que
garanticen el acceso a estas en próximas consultas.
Resultados y discusión
Del estudio de la vulnerabilidad
social y educativa de los estudiantes de la Universidad Autónoma de Santo
Domingo, la aportación de los métodos teóricos y su integración metodológica en
la investigación, condujeron a la identificación de las particularidades de la
educación dominicana actual y estas son:
- La necesidad de
la búsqueda de una alternativa de transformación, que permita la
ampliación del acceso a la educación superior y la culminación exitosa de
los estudiantes con desventajas sociales.
- La necesaria
determinación de la vulnerabilidad social y educativa de los estudiantes
de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, para enrumbar la educación
hacia métodos y estilos de trabajo que favorezcan el desarrollo de la
sociedad a partir del mercado de empleo
- La educación dominicana necesita mejorar la calidad en todos los
niveles de enseñanza, requiere transformación y desarrollo, pero para
lograrlo, debe contar con la voluntad política del Estado y la disposición y unión de todo el personal que labora en esta área tan
importante de la vida social. Los cambios educacionales requieren de
transformaciones en las relaciones sociales, lo cual tiene un
condicionamiento económico, que no puede producirse desde la investigación
educativa.
- El contexto actual exige el estudio de la realidad imperante, la
toma de conciencia de las dificultades existentes, la atención educativa a
los estudiantes con desventajas sociales y la creación e implementación de
estrategias, que logren atenuar las desigualdades existentes y permitan
ampliar el número de niños y jóvenes que acceden a la educación y
finalizan su formación en la enseñanza superior. El logro de esta meta es
premisa esencial para la estimulación del desarrollo social.
- Los estudios de licenciatura tienen una baja conexión con los
mercados de trabajo.
- Se destaca el bajo rendimiento educativo y la falta de competencias
cognitivas como aspectos que afectan a un alto porcentaje de la población
juvenil, perjudicando especialmente a los más pobres.
- Se habla de la disímil distribución del capital cultural. Hay
estudiantes, mayoritariamente de las clases media y alta, cuyos hogares
constituyen una prolongación de la escuela. Mientras que
en las clases más desfavorecidas, impera la pobreza y otras condiciones de
vulnerabilidad, que exigen propuestas de acción contextualizadas y
adaptadas, que respondan adecuadamente a las necesidades de aprendizaje,
salud y protección de los estudiantes, para garantizar el ingreso y
permanencia de estos en la educación formalizada.
La educación como
proceso social y su concreción en la República Dominicana.
El hecho educativo es comprendido
desde una diversidad de posiciones dando mayor o menor énfasis al contexto
social y su poder de moldeamiento de los seres humanos mediante la educación.
Esta puede ser formal informal o no formal, con diversidad de grados de
intencionalidad y conciencia entre educador y educando. (Valenzuela y Silva,
2020)
La educación, en cualquier periodo del
desarrollo social, tiene la función de socializar a las nuevas generaciones; lo
que significa, prepararlas para vivir en sociedad, para convivir como
ciudadanos responsables, capaces de cumplir funciones cívicas y poseedores de
un sistema de valores que le permita actuar en correspondencia con el contexto
social. La educación como actividad sistemática, está llamada a formar a las
personas en su condición de ciudadano. Educar significa socializar, es decir,
transformar al educando en un ser social, en parte constitutiva de una
comunidad humana particular.
Esta condición es el único modo
posible para hacerlo representante y partícipe del género humano. Se concibe a
la educación como un fenómeno histórico social, núcleo del proceso
socializador, responsable de la transmisión de la cultura en la formación del
individuo. La educación tiene como elemento central la formación de la
personalidad, de ahí que se conciba como un proceso conscientemente organizado,
dirigido y sistematizado sobre la base de una concepción pedagógica
determinada, que se plantea, como objetivo más general, la formación
multilateral y armónica del educando para que se integre a la sociedad en que
vive, contribuya a su desarrollo y a su mejoramiento.
En un sentido amplio, la
educación constituye el proceso de formación y desarrollo del sujeto para
insertarse en una sociedad determinada. En un sentido más concreto, se entiende
la educación como el proceso de enseñanza-aprendizaje que se realiza en
determinadas instituciones docentes, sujeto a normas preestablecidas y
evaluaciones periódicas, que conduce a la obtención de una forma concreta de
reconocimiento; título, grado, nivel. Desde esta lógica de pensamiento, se
puede analizar la educación como proceso, institución (sistema educativo de
cada país, tipos de escuelas, niveles de instrucción, estructuras de dirección,
entre otros), y como resultado (comprende al sujeto educado, portador y
expresión de la cultura material y espiritual del país y de la humanidad).
Es importante concebir a la
educación, además, como actividad, como un sistema de acciones educativas que
se desarrollan por los agentes y agencias educativas o socializadoras (maestros,
padres, vecinos, líderes comunitarios, organizaciones sociales, medios de
comunicación, entre otros). Como profesión comprende el trabajo de los
educadores, profesionales, maestros y profesores. La educación como fenómeno
social, es el reflejo del grado de desarrollo económico y social alcanzado por
la sociedad, que se expresa en el nivel de los conocimientos teóricos y las
habilidades prácticas acumuladas por la humanidad, así como en los sistemas de
valores socialmente aceptados en un momento histórico-concreto.
Esto le da un carácter histórico
a la educación y le permite ponerse en correspondencia con los intereses,
necesidades, puntos de vista y concepción del mundo de las clases sociales, en
cada momento histórico-concreto de su desarrollo, que se expresan en la
selección del contenido de la educación y en las formas y métodos para
realizarla. De esta forma, la educación es un fenómeno social sujeto a
permanente transformación. Lo que en una época se consideraba como conocimiento
válido y cierto, hoy puede exigir transformación, mejoramiento. Los
conocimientos envejecen, así como también las costumbres, las normas sociales y
los valores que sustentan una cultura. La sociedad incorpora nuevos valores en
sustitución de los que han perdido significado.
La dinámica de la educación
superior dígase movilidad, los enfoques cambiantes de financiamiento, el papel
de la tecnología conduce a pensar en situaciones que influyen en los sectores
sociales. La diversidad de estudiantes
en las instituciones de la educación superior es uno de los fenómenos que
caracteriza a sector a nivel mundial (Peralta, 2023). La presencia de grupos
sociales y estudiantiles en el contexto universitario en República Dominicana
en situación de vulnerabilidad, se precisa se argumente también en su condición
de vulnerabilidad social. La República Dominicana vive una fuerte desigualdad,
que se evidencia en todas las interacciones sociales. Los aspectos relativos a la inequidad y la
pobreza son situados, una vez más, en el primer plano de la agenda nacional.
Situación que se presenta como
consecuencia de la pandemia del Covid-19, donde la carestía de la vida,
especialmente, en los productos de primera necesidad y de los combustibles, acentúan
la vulnerabilidad Diversos estudios socioeconómicos
que enfocan la realidad dominicana aportan datos que evidencian que las
condiciones de vulnerabilidad a las que se enfrenta un alto porcentaje de
dominicanos, que se agravan en el caso de ser mujer o de pertenecer al grupo
social de menores ingresos, se agudiza. Las mujeres presentan altos niveles de
embarazo en la adolescencia y se unen en relaciones de pareja desde edades
tempranas.
En la sistematización realizada
por las autoras sobre la desigualdad social y que tiene su incidencia en el estatus
de vida ciudadano en el mundo, en sectores estratégicos como el de la educación
y con impacto en el sector estudiantil vulnerable (Behr,
et al., 2020); (Farcuit, et al., y Rodríguez, 2022) señalan
el tema de la pandemia de la Covid- 19, con efectos
sensibles en la deserción escolar y problemas profundos en los sistemas
educativos. (Lorenzo, et at., 2023). Se desatacan
los problemas económicos, psicosociales, barreras tecnológicas, la satisfacción
de las necesidades de los estudiantes. (Perchinunno, et al., 2021 y Lorenzo, et at., 2023). Está
presente una sensible incertidumbre ante los cambios bruscos de los sistemas
educativos y el insuficiente acompañamiento a los estudiantes. (Otu, et al., 2023)
Tales problemáticas que través de
los años han incidido como problemáticas en el acceso a la educación superior
(Acevedo, 2021), se han exacerbado después de la pandemia; sin embargo, desde
la investigación y con una visión ampliada de esta problemática se estudian los
aspectos emocionales, económicos y tecnológicos, para desde el componente
académico y de las políticas educativas dar respuestas que ayuden a la
comunidad universitaria. (Martínez y Yeomans,
2021). Este ambiente general impacta en
las comunidades vulnerables, en particular en los estudiantes vulnerables que
pueden verse frustrados en sus anhelos de ingresar a la educación superior y
mantenerse en esta. Realidad que asiste en el contexto educativo en la
República Dominicana.
Los estudiantes que asisten a la
UASD provienen –según fuentes internas- en gran medida, de sectores marginados.
Sus aspiraciones son superar esa pobreza y las grandes necesidades materiales,
persiguiendo una movilidad social, la que creen será la única forma de mejorar
esas condiciones. Entre esta población hay grupos de estudiantes trabajadores,
quienes tienen la necesidad de insertarse en el mundo laboral y estudiar a la
vez, por lo regular en horarios nocturnos; poseen además responsabilidades
familiares, y en muchos casos están en sobre edad en cuanto a la esperada para
acceder a la educación superior.
En la concepción social, el
ingreso a la universidad por lo general a la pública- no solo garantiza la
igual disponibilidad en el acceso, permanencia y egreso a todos los ciudadanos
preparados para participar plenamente en esta etapa educativa, sino también que
estos alcancen el desarrollo efectivo de nuevas competencias y capacidades para
el progreso productivo con pertinencia y relevancia. Al estudiar la educación
dominicana actual, se debe tener en cuenta la desigualdad existente en la
sociedad, determinante por el cual, las personas tienen un acceso desigual a
los recursos, servicios y posiciones que la sociedad valora. La desigualdad
surge en cuanto al modo en que individuos y grupos se ordenan y son evaluados
unos por otros.
El autor (Castillo, 2023, p. 12),
destacó su interés por promover en la República Dominica una educación de calidad
y un sistema educativo funcional en el país, con un rol activo principalmente
de la educación. En la relación de
evaluación mutua sociedad –hombre es más importante aún, la desigualdad social
que se relaciona, con las diferentes posiciones en la estructura social
vigente. Incide también, la desigualdad educativa, la cual afecta a los
sectores más pobres de la sociedad, ya sea en los países desarrollados como en
los subdesarrollados. A pesar de la
extensión de la escolaridad en los momentos actuales, la desigualdad en cuanto
a las oportunidades educativas entre las distintas clases que componen la
sociedad, sigue estables.
La realidad social dominicana, desarticula
la clásica división de clases sociales de las teorías sociológicas que
establecen tres grandes grupos: clase alta, clase media y clase baja, esta
pirámide es solo modélica-referencial. Dentro de la clase social alta
dominicana, hay desniveles marcados por la educación, la cultura y el origen,
lícito o no, de los bienes adquiridos; como grupo social, pertenecen todos a la
clase alta, pues tienen similar poder adquisitivo y similares oportunidades de
acceso a bienes y servicios: las mismas tiendas, restaurantes, clubes privados,
entre otros; sin embargo, la educación y los modales, los separa.
Lo último es un problema
creciente, que se relaciona con la pobreza, la marginación social, la
desigualdad económica, el hambre, los conflictos sociales, la explotación
laboral, la vulnerabilidad, la exclusión y la ausencia por parte del estado, de
un interés sostenido hacia la juventud. A pesar de esta situación cada 31 de enero en
la República Dominicana se celebra el Día de la Juventud; una fecha dedicada a
reconocer el papel de esta en la construcción del país. Pero como en los apartados anteriores se
enfatiza las limitaciones sociales: desempleo juvenil, el debilitado acceso a
la educación, inseguridad. (Ministerio
de Educación, 2025) En el país se vive una fuerte desigualdad, que se evidencia
transitando por las calles, en los barrios y en los espacios educativos.
Los aspectos relativos a la
inequidad y la pobreza son situados, una vez más, en el primer plano de la
agenda nacional, como consecuencia de la pandemia, la carestía de la vida,
especialmente en los productos de primera necesidad y de los combustibles.
Varios estudios socioeconómicos que enfocan la realidad dominicana, exponen
datos que evidencian que las condiciones de vulnerabilidad a las que se
enfrenta una gran parte de la población se agravan, en el caso de ser mujer o
de pertenecer al grupo de menores ingresos. Las mujeres presentan altos niveles
de embarazo adolescente y de unión temprana. En efecto, el 24.9% de las mujeres
dominicanas entre 20 y 24 años de edad, tuvo su primer hijo antes de los 18
años (siendo esta la tasa más alta de América Latina), y 4 de cada 10 mujeres
entre 15 y 29 años de edad están casadas o en unión libre.
Esta combinación de factores es
una posible explicación para el hecho de que el 39.8% de la juventud abandona
la escuela por razones familiares, mientras que igual número de hombres
jóvenes, señaló haber abandonado los estudios porque debía trabajar para
satisfacer necesidades económicas. Es importante destacar que el 33.9% de los
jóvenes hombres, dicen salir de la escuela porque no les gustaba o no querían
estudiar. Asimismo, se observan desigualdades entre los jóvenes en lo que
respecta al acceso a la educación y el empleo, según el género y nivel
socioeconómico de los hogares a los que pertenecen. En efecto, tanto los
niveles de participación educativa, como de desempleo, son significativamente
menores en aquellos cuyas familias se encuentran entre los sectores más altos
de ingresos o son hombres.
En el año 2020 se presentó el Proyecto de la USAID
Alianza para la Educación Superior (AES), mediante el soporte del Ministerio de
Educación Superior, Ciencia y Tecnología (MESCyT), para fortalecer la capacidad
de las Instituciones de Educación Superior (IES), promoviendo alianzas
estratégicas entre IES estadounidenses, dominicanas y otros aliados relevantes
del sector público-privado, para que aumenten las oportunidades de acceso,
culminación de los estudio terciarios y colocación laboral a jóvenes,
especialmente aquellos que se encuentran en entornos de alto riesgo.
El enfoque del proyecto Alianza
para la Educación Superior, se alinea con la Política Educativa de USAID, al
priorizar a los jóvenes en entornos de alto riesgo, donde el crimen y la violencia
representan un riesgo cotidiano. El proyecto se planteó para ser desarrollado y
probar un modelo de apoyo institucional y de servicios estudiantiles, basado en
la realidad local y aprovechando las mejores prácticas para el acceso y la
retención para asegurar una educación de calidad, que sea relevante y que
promueva las prácticas y experiencias de socios internacionales, a fin de
facilitar la inclusión social de los jóvenes y su entorno.
La inclusión implica para estos
jóvenes que se incrementan sus oportunidades de trabajo decente y bienestar
social, con la integración de las familias y comunidades. Desde septiembre del
2019, fecha de inicio del proyecto Atención a la Educación Superior (ES), se
pone en ejecución una fase piloto en la Universidad ISA que, en los años
posteriores, será replicada por las instituciones de Educación Superior
beneficiarias. Los resultados se incorporarán a un conjunto de herramientas y
recomendaciones de políticas que permitirán, a través del Ministerio de
Educación Superior, Ciencia y Tecnología (MESCyT) construir y llevar a cabo un
modelo de fortalecimiento institucional y de mejoramiento de los servicios
estudiantiles a escala y réplica nacional en la República Dominicana.
En la reseña periodística, que es
la fuente de que se dispone, no indica los criterios para seleccionar a los
estudiantes beneficiarios, ni cuánto de estos pertenecen a la Universidad
Autónoma de Santo Domingo. Si se indica que es un proyecto que estará en
vigencia hasta el año 2029. El gobierno dominicano aportará un total de RD
$644, 241,794. De una forma general, la nota (Silva, 2023) informa:
Que todos los que provengan de
sectores caracterizados por factores que afectan negativamente en el
rendimiento educativo; como la delincuencia, los vicios, la contaminación sónica,
la falta de oportunidades y el poco apoyo familiar, debido a los bajos ingresos
económicos, podrán participar en el programa, que forma parte de la nueva
alianza para la educación superior, con el que se está acompañando a estudiantes
de nivel secundario y sus familias en la transición a la universidad. (p. 34)
Estas palabras, dichas por el Ministro de Educación Superior sugieren que los aspectos que
el Estado considera son puramente económicos. En los estudios respecto de la
retención/deserción de los estudiantes en la educación superior, se evidencia
que los factores más importantes que configuran las experiencias educacionales
incompletas, son las variables de origen social, tales como el capital
económico (expresado en el ingreso forzado al mercado laboral o en la deserción
por falta de recursos) y el capital cultural, heredado de las familias y el
establecimiento de educación secundaria. La educación superior en el
mundo, experimenta grandes transformaciones, atendiendo al desarrollo alcanzado
por la ciencia y las tecnologías de la información y las comunicaciones, así
como en las necesidades de los hombres que hacen ciencia.
El marco legal de la educación
superior en la República Dominicana contempla: La ley 139-01 de Educación
Superior, Ciencia y Tecnología;
Reglamento de las Instituciones de la Educación Superior y Reglamento de Instituciones
y Programas del Técnico Superior, que caracteriza el sistema educativo superior
en el país. (Acosta, 2023). Igualmente, dentro del marco legal, se encuentra
legislado el Sistema Nacional de Educación Superior, Ciencia y Tecnología,
compuesto por las instituciones que de manera explícita están orientadas al
logro de los objetivos de desarrollo del país.
La Ley de referencia acoge a
los jóvenes que terminan sus estudios de nivel secundario. Se ofrecen tres
niveles de educación superior: técnico (técnico superior, tecnólogo y
profesorado), de grado (licenciaturas) y de posgrado (especialización,
maestrías y doctorados). El Consejo Nacional de Educación Superior de Ciencia y
Tecnología; es el organismo encargado de validar la oferta académica de nivel
superior y los títulos que expiden las instituciones educativas de nivel
superior. Se ofrece educación superior en las instituciones técnicas de
estudios superiores, instituciones especializadas y universidades. Estas
instituciones pueden ser gestionadas por el Estado o por el sector privado.
En 2008 se aprobó el Plan
Decenal para la Universidad (2008-2018), lo que supuso un primer diagnóstico
serio de la situación y las perspectivas de futuro de la universidad
dominicana. Dicho Plan surgió como consecuencia del Foro Presidencial por la
Excelencia de la Educación, realizado en febrero del 2007. A raíz de esto, en
los años siguientes, se logró un clima de discusión y reflexión en la
perspectiva de una modernización profunda de la institución, aumento del
programa de becas (con mayor énfasis de graduar maestros sin título), los
programas de English por inmersión, vinculación de la universidad con los sectores
productivos, mayor financiación para investigación, programa de ayuda a
estudiantes de recursos bajos, entre otros.
En la concepción social, el
ingreso a la universidad, por lo general a la pública, no sólo garantiza la
igual disponibilidad en el acceso, permanencia y egreso, a todos los ciudadanos
preparados para participar plenamente en esta etapa educativa, sino también,
que estos alcancen el desarrollo efectivo de nuevas competencias y capacidades
para el desarrollo productivo con pertinencia y relevancia. La entrada a la
universidad supone muchos otros saberes previos, por lo que en diversos
estudios realizados en América Latina y otras latitudes, se profundiza en este
fenómeno.
La sociedad vive la
modernización constante de los procesos productivos, nuevos avances
tecnológicos se dan cada día, rápidos cambios en la estructura del empleo, la
aparición de entornos laborales inciertos, hay nuevas exigencias para el
desempeño en el trabajo y para el ejercicio profesional, el uso de las TIC, la
globalización de la economía, la cultura y la educación, especialmente la
superior, la internacionalización de los procesos sociales que exigen apertura
mental, la integración de esfuerzos y recursos, el valor agregado del
conocimiento en la producción de bienes y servicios y la generación de nuevas
relaciones entre los miembros de la sociedad. Estos y otros factores determinan cambios en
la sociedad.
De manera formal, la UASD por
ser una universidad estatal, se concibe como pública, abierta y democrática, por
lo que no se enuncia propiamente la exclusión por condiciones sociales y
económicas, pero en muchos hechos de la vida universitaria, se evidencia
desigualdad en las condiciones en que los estudiantes entran y tratan de
permanecer en la academia. Jóvenes bachilleres que vienen de sectores con altos
niveles de pobreza, están claramente en desventaja, porque ingresan a la
universidad con un nivel educativo más bajo, sus familiares no disponen de los
recursos económicos para transporte, alimentación y para dotarlos de recursos materiales
de estudio.
El panorama actual demanda
mejorar la calidad, diseñar e implementar estrategias que fomenten el acceso,
la permanencia y el egreso de todos los estudiantes a una educación que
promueva ciudadanía, forme en valores y permita un desarrollo laboral
suficiente para una vida digna, productiva y socialmente solidaria. El efecto de la
pandemia en la educación superior se manifiesta en la reducción drástica de la
matrícula y la digitalización de los procesos. Aun las universidades dominicanas
no realizan una evaluación consciente, en toda su dimensión, de la incidencia
que tiene esta situación mundial en su quehacer.
Es una realidad que a raíz de la Pandemia de COVID-19, se acentuaron
los niveles de desigualdad económicas y social y que pareciera que a nadie le
importara, según estudio de del
Observatorio de Políticas Sociales y Desarrollo de la Vicepresidencia de la
República Dominicana, sea porque las condiciones de trabajo justifican el
pluriempleo, o sea por el bajo presupuesto para la investigación, o ambas, el
perfil de la educación superior dominicana es predominantemente un sistema de
otorgar credenciales, con muy pocas repercusiones en la producción de
conocimiento. (Cedeño, 2019)
Se revela una tensión
entre el marco legal dominicano y su implementación, donde la educación
superior reproduce, en lugar de reducir, desigualdades. Se requieren:
- Políticas focalizadas en estudiantes vulnerables.
- Vinculación real universidad-sector productivo, mediante reformas
curriculares.
- Investigación local que monitoree el impacto de programas.
La educación dominicana
necesita trascender su rol de ‘otorgadora de credenciales’ para convertirse en
un motor de movilidad social, mediante acciones que integren lo académico, lo
económico y lo territorial. El presente estudio trasciende el diagnóstico
académico al ofrecer insumos concretos para perfeccionar políticas
públicas desde la urgencia de reformular becas estatales (ej: criterios transparentes basados en vulnerabilidad
socioeconómica, no solo mérito). A partir de la necesidad de programas de
acompañamiento integral (psicosocial, económico y académico) para estudiantes
trabajadores y mujeres embarazadas. La cooperación internacional debe ser valida
proyectos como USAID AES, pero es necesario tener en cuenta su
limitado alcance sin articulación con políticas nacionales.
Conclusiones
En
el marco de la educación superior en la Republica Dominicana y en el ámbito
específico de la formación docente, se identifican diversas situaciones necesitadas
de una atención a profundidad para seguir mejorando y
desarrollando la educación nacional.
La preparación de maestros y
maestras, con alto perfil profesional, en capacidad de incorporarse a la
formación integral de la población, es un aspecto relevante para la
construcción de conocimientos, y formar en valores ciudadanos, a la población
joven, futuro de la nación.
La educación, como bien común,
puede conformar valores y actitudes para vivir juntos y disminuir las
desigualdades y se destaca el papel de los docentes y educadores como agentes
impulsores de estos cambios.
La educación superior, tiene la
obligación de brindar propuestas para la solución de problemáticas relacionadas
con el acceso, egreso y permanencia del estudiantado.
Dentro de la diversidad de
aspectos que debe considerar la educación superior, están la formación docente,
la diversidad de los educandos, la vulnerabilidad social y educativa que sufren
muchos de los estudiantes, la demanda de la sociedad de mejores profesionales y
la calidad del profesional para actuar ante los cambios permanentes. Lo que
ampliaría el campo de posibilidades de desarrollo social desde la educación en
la República Dominicana.
Es necesario que se tomen
urgentes medidas políticas, institucionales y pedagógicas, para intervenir y
evitar que tantos estudiantes abandonen los estudios y que otros sobrepasen
todos los tiempos estimados. Poner en marcha más medidas de apoyo en relación a
colaborar con superar necesidades básicas para disminuir la desigualdad en esa
población; de manera.
Referencias Bibliográficas
Acevedo,
F. (2021). Concepts and measurement of dropout in higher education: A critical
perspective from Latin America. Issues in Educational Research, 31(3), 661-678.
http://www.iier.org.au/iier31/acevedo.pdf
Acosta,
M. (2023). Características y desafíos de la Educación Superior en la República
Dominicana. Universidad Abierta para Adultos. https://dspaceudual.org.bitstream/Re-UDUA L.
Behr, A., Giese, M., Teguim Kamdjou, H. D., & Theune, K.
(2020). Dropping out of university: A literature review. Review of Education,
8(2), 614-652. https://doi.org/10.1002/rev3.3202
Castillo, J. (Dir,). (2023). Calidad de la educativa en la República
Dominicana: Retos y desafíos. Fundación Solidaridad. https://solidaridad.do
Castro-Zapata, E. I., Guateque-Londoño, J. F. y Londoño-Bonilla ,
P. (2023). Importancia del docente y su formación en las reformas educativas en
Latinoamérica / importance of
teachers and their learning process in the educational reforms in Latinamerica: Pedagogía
Y Sociedad, 25(63), 18–42. https://revistas.uniss.edu.cu/index.php/pedagogia-y-sociedad/article/view/1407/2490
Cedeño,
M. . (2019). Educación
superior dominicana: expansión, desarrollo y perspectivas futuras. Boletín
del Observatorio de Políticas Sociales y Desarrollo, Santo Domingo, República
Dominicana. https://www.researchgate.net/publication/331408071_Educacion_superior_dominicana_expansion_desarrollo_y_perspectivas_futuras
.
Farcnik,
D., Domadenik Muren, P.,
& Franca, V. (2022). Drop-out, stop-out or prolong? The effect of COVID-19
on students’ choices. International Journal of Manpower, Emerald Group
Publishing Limited, vol. 43(7), pages 1700-171. https://ideas.repec.org/a/eme/ijmpps/ijm-06-2021-0353.html
González Fernández- Larrea, M., González González,
R., González Aportela, O. y Batista Mainegra, A. (2021).
Educación y sociedad: universidad, extensión
universitaria y comunidad. Revista Cubana de Educación Superior, 40 (Supl. 1). http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0257-43142021000400020&lng=es&tlng=es
López Durán, A. M. y Zawady Pérez, Y. (2021). Estrategias didácticas innovadoras
para una educación inclusiva en estudiantes con problemas de aprendizaje (Tesis
de Maestría, Universidad de Costa Rica).
Repositorio institucional de la Universidad de la Costa. Disponible en: https://repositorio.cuc.edu.co/entities/publication/0fe0550b-c38b-41f0-86f3-3d63cf9d591e
Lorenzo Quiles,
O., Galdón López, S., & Lendínez Turón, A.
(2023). Factors contributing to university dropout: A review. Frontiers
in Education, 8, 1159864. https://doi.org/10.3389/feduc.2023.1159864
Martí Chávez, M.
Y., Montero Padrón, D. C. B., & Sánchez González, D. C. K. (2018). La
función social de la educación: referentes teóricos actuales. Revista
Conrado, 14(63), 259–267. Recuperado a partir de https://conrado.ucf.edu.cu/index.php/conrado/article/view/761
Martínez Líbano,
J., & Yeomans Cabrera, M. M. (2023). Post-pandemic
psychosocial variables affecting academic dropout in a sample of Chilean
higher-education students. Frontiers in Education, 8, 1293259. https://doi.org/10.3389/feduc.2023.12
Ministerio de Educación. (2025). Celebrando el futuro de la juventud
Dominicana. Educando, Portal de la Educación
Dominicana. Disponible en: https://educando.edu.do/portal/celebrando-el-futuro-de-la-juventud-dominicana/
.
Otu,
M. N., Ehiane, S. O., Maapola-Thobejane,
H., & Olumoye, M. Y. (2023). Psychosocial
Implications, Students Integration/Attrition, and Online Teaching and Learning
in South Africa’s Higher Education Institutions in the Context of COVID-19. Sustainability, 15(8), 6351. https://doi.org/10.3390/su15086351
Peralta Checo,
H. T. (2023). Estudiantes en situación de vulnerabilidad problema social actual en la educación
superior dominicana. Varona. Revista Científico Metodológica. (77) http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_abstract&pid=S1992-82382023000200014&lng=es&nrm=iso
.
Perchinunno, P., Bilancia, M., & Vitale, D.
(2021). A Statistical Analysis of Factors Affecting Higher Education
Dropouts. Social Indicators Research, 156 (2-3), 341-362. https://doi.org/10.1007/s11205-019-02249
Rodríguez
Torres, E. (2022). El proceso de formación del liderazgo en dirigentes
estudiantiles universitarios. Opuntia Brava, 14(3), 27–37. Recuperado a partir
de https://opuntiabrava.ult.edu.cu/index.php/opuntiabrava/article/view/1619
Silva, L. (2023). Mescyt volverá a
otorgar becas a jóvenes vulnerables. Caribe digital. Disponible en
: https://www.elcaribe.com.do/panorama/pais/mescyt-volvera-a-otorgar-becas-a-jovenes-vulnerables/
.
Valenzuela Mayorga, A. y Silva Jiménez, D. (2020).
Educación como fenómeno social. Revista Pensamiento Académico de la Universidad UNIACC, 30 (1). https://doi.org/10.33264/rpa.202001-03.